MAS ALTERNATIVA QUE NUNCA...

Hacer algún tipo de actividad deportiva ya era algo que disfrutaba inmensamente en mi tiempo libre. Lo que cualquier persona espera es poder disfrutar de lo que uno gusta por mucho tiempo; sin embargo nadie elige cuando van a ocurrir los accidentes y este es mi caso. La pasión que significaba para mi se debe interrumpir debido a un severo accidente de tránsito, y una secuela de ello en mi cuerpo es la parálisis de mi hombro derecho. Esta es una de las razones de este artículo. Muchas de las actividades que antes realizaba con cierta facilidad ahora me serán imposibles o tremendamente difíciles.

     El accidente en sí mismo me dejó politraumatizado y con lesiones internas que dificultaron mi recuperación. De esto ya hace 5 meses.

     Recuerdo que el día anterior, un domingo, había ido a entrenar al parque, al día siguiente, por la mañana, luego de esquivar la mala maniobra de un bus, freno como única posibilidad con mi moto y caigo bajo el vehículo mayor. Una de las ruedas pasa por encima de mi cuerpo aplastándolo. Muchos pensaron que no sobreviviría, pero aquí estoy, escribiendo, me gustaría decir a todo pulmón perro luego de un hemoneumotórax , me tengo que conformar con el 70 u 80 % de la capacidad cardiovascular que poseía con cincuenta años.

      Hace 15 días atrás, recuerdo haber despertado muy temprano con el inequívoco deseo de salir a trotar. Me atreví a concretar mi ansia más o menos al medio día. Fueron 8 minutos que me dieron a entender que podía hacerlo, El piso de maicillo, las maquinas de gimnasia de la plaza me permitieron hacer de esos 8 minutos un momento de infinita alegría. Claro, hace algo más de 5 meses estaba hospitalizado en la Unidad de Cuidados Intensivos, lleno de personas que hacían todo lo posible para que no muriera.
     Hoy nuevamente salí a trotar, esta vez fui capaz de estar 14 minutos entre elongaciones, trote y gimnasia. Partí con 90 pulsaciones por minutos y terminé con 130, es decir, trabajé con un 76 %de mi capacidad. Luego comenté en casa que podría haber seguido, pero es preferible ir de a poco. Por supuesto, todo fue registrado en una página Excel, y el nombre de la carpeta: REHABILITACION AEROBICA.
     La motivación que surge luego que uno hace lo que más desea hacer se hizo patente. Por la tarde continué con la rehabilitación del hombro con ejercicios específicos, algunos obtenidos de internet y aplicados de acuerdos de a cuerdo a las posibilidades, y otros aprendidos en terapia kinesiológica en Santiago.